Mensaje de condena y condolencia de Fethullah Gülen por el ataque a dos mezquitas en Nueva Zelanda

Me entristece profundamente saber del atentado terrorista contra dos mezquitas de Christchurch (Nueva Zelanda), en la que al menos 49 personas resultaron muertas y 20 heridas. Condeno enérgicamente este horrible ataque, y pido a Dios, el Compasivo, misericordia para los que perdieron la vida, paciencia y perseverancia para sus seres queridos y una pronta recuperación de los heridos.

Lamentablemente, este atroz ataque contra los musulmanes en su fiesta religiosa semanal y mientras realizaban su adoración es el incidente más reciente de una cadena de ataques contra fieles en mezquitas, iglesias, sinagogas y otros lugares de culto durante los últimos meses. La psicología subyacente que se manifiesta en forma de islamofobia, ataques a los cristianos, antisemitismo u otras formas de intolerancia basadas en prejuicios, miedo y odio es una tragedia humana. Independientemente de la religión o pensamiento que se tenga, el terrorismo es una enfermedad única que afecta a toda la humanidad y la humanidad debe unir sus manos para resolverla.

Un pilar importante de la labor que hay que realizar es el recuerdo y la internalización de nuestra identidad humana común. El tratamiento de la enfermedad de atacar a los que son diferentes por parte de personas cuyas vidas están impulsadas por el miedo y el odio es el cultivo -mediante el diálogo y la educación- de una perspectiva que considera a cada ser humano intrínsecamente digno.

En esta triste ocasión, envío mis más sinceras condolencias a los musulmanes del mundo y al pueblo de Nueva Zelanda, que perdió a sus conciudadanos y vecinos. Que Dios ayude a todos los que, en el gobierno o en la sociedad civil, se esfuerzan por erradicar el terrorismo y por difundir el amor y la solidaridad entre todos los seres humanos.